Blockchain: Un mundo en el que confiar

La confianza es uno de esos pegamentos invisibles que hacen funcionar al mundo. La formación de confianza dentro del sistema económico, social y ético de una sociedad es un proceso tan vital para su desarrollo y equilibrio, como frágil y complejo de mantener. Por eso, cada paso que se gane en dar a la confianza la validez de lo tangible tiene un valor enorme. Con la tecnología blockchain, y su capacidad para crear un registro transparente e inmutable de las transacciones, estamos en el camino de dar un paso de gigante.

Una empresa española, Comgo, está liderando una de las implantaciones de blockchain más fascinantes y reveladoras que se están haciendo en el mundo para entender las enormes aplicaciones e implicaciones de esta tecnología. Está llevando blockchain a un área que vive, por excelencia, en el ámbito más sensible de la confianza: las actividades de las ONGs y la acción social.

La confianza que tiene un donante cuando decide contribuir al proyecto de una ONG se basa fundamentalmente en la buena fe y en la credibilidad y reputación que tenga la entidad. Este sistema, además de su fragilidad, penaliza especialmente a las ONGs más pequeñas, que no disponen ni de la capacidad ni de los recursos necesarios para atraer el interés y la confianza de un mayor número de donantes. La desconfianza hacia las ONGs es, de hecho, uno de los tres principales factores mencionados por los españoles para no colaborar con ellas, según el estudio "La colaboración de los españoles con las ONG y el perfil del donante", realizado en 2016 por la Asociación Española de Fundraising.

Ahora, con la plataforma Comgo.io, construida sobre IBM Blockchain, se abre un modelo nuevo, más justo, seguro y transparente. En la primera experiencia que se está realizando como piloto, la ONG it-willbe.org está digitalizando a través de esta plataforma su proyecto de ayuda a 200 niños que viven solos en la calle alrededor de la estación de tren de Surat, en Bombay. Los donantes pueden seguir en todo momento los avances e hitos del proyecto, qué dinero se ha gastado y en qué actividades. Cuando uno de los trabajadores sociales que asisten a estos niños recibe su salario o cuando se compran productos de alimentación o higiene para atenderles se registra en el sistema de una manera fiable, veraz e inmutable.

Esa transparencia crea un poderoso lazo de confianza entre la ONG y sus donantes, quienes, además de contar con la veracidad de lo que está ocurriendo con sus donaciones, se sienten también mucho más cercanos e involucrados con la contribución social que están haciendo.

Creo que es un caso ejemplar de lo que la tecnología blockchain puede aportar. IBM trabaja ya en más de 400 proyectos blockchain cuyo avance está destinado a mejorar y transformar aspectos claves de cómo funciona el mundo. Con Maersk vamos a desarrollar una plataforma para aplicar blockchain a la mejora del sistema global de transporte de mercancias. Hoy, una quinta parte de lo que cuesta transportar internacionalmente un producto se genera en todo el papeleo y la documentación necesarias para seguir su registro desde el origen al destino.

Empresas como Walmart, Uniliver y Nestlé están trabajando con IBM para desarrollar el uso de blockchain en la industria de la distribución. En uno de los primeros proyectos, aplicados a la seguridad y trazabilidad de los productos alimentarios, WalMart puede ahora identificar la trazabilidad de unos mangos desde su origen hasta el punto de venta en menos de 3 segundos, un proceso que antes requería 30 días.

Decidimos y actuamos en función de nuestra confianza. Cada día, miles de procesos y millones de transacciones se sustentan en un delicado equilibrio en el que se combina nuestra disposición, de buena fe, a depositar nuestra confianza en terceros y en un complejo, costoso y no siempre transparente marco de regulaciones y garantías. Blockchain, en su capacidad de "digitalizar" y aportar trazabilidad a la confianza, puede ayudarnos a crear un mundo en el que podamos confiar con mucha más seguridad, transparencia y eficacia.

Eso sí, la responsabilidad es únicamente nuestra. Las acciones, los valores, los comportamientos que merecerán o no confianza seguirán dependiendo de cada uno de nosotros, de cada empresa y de cada institución. Blockchain no crea la confianza; la certifica. Y eso es muchísimo.